Turismo en Uyuni. Entre el cielo y la Tierra

Turismo en Uyuni. Entre el cielo y la Tierra

Turismo en Uyuni. Bolivia, Sudamérica.

En Bolivia, más precisamente al sudoeste del país, se encuentra Uyuni ciudad del municipio del mismo nombre y capital de la provincia de Arturo Quijarro. Tiene una población aproximada de 30.000 habitantes y fue muy nombrada, ya que recientemente quedó inaugurado allí el Aeropuerto Joya Andina y por otro lado, en 2014 fue sede del Rally Dakar.

Pero seguro su mejor carta de presentación sea el hecho de tener el mayor desierto de sal continuo y más alto del mundo, el salar de Uyuni, precisamente. Se encuentra ubicado geográficamente dentro de la región altiplánica de la Cordillera de los Andes. Por otro lado, es la mayor reserva de litio en el mundo, ya que posee el 80% del litio mundial junto a otros minerales como potasio, boro y magnesio.

La ciudad de Uyuni fue fundada en el año 1889 y el origen de su nombre aparentemente se remonta a una voz aymara “Uyu”, que significa lugar de concertación, y “ni” significa lugar, por lo tanto su significado completo sería “lugar de concertación”. Algunos lugareños la conocen como salar de Tunupa.

Además del salar, allí también se encuentran las Lagunas de Colores, los Géiseres y el Árbol de Piedra.

El área que ocupa actualmente este desierto, hace 40.000 años, estaba cubierto por el Lago Minchin y posteriormente por el Lago Tauka. Alcanzaban un nivel de 100 m por encima del nivel actual del salar.

Respecto a este lugar, existe una leyenda de origen aimara que habla de tres antiguos dioses: Tunupa, Kusku y Kusina. Según se recuerda todavía en el suroeste de Bolivia, Kusku, marido de Tunupa, engañó a ésta con Kusina. Las lágrimas de Tunupa fueron de tal calibre que dieron lugar a un gran lago salado.

Se lo conoce como uno de los paisajes más increíbles del planeta por el efecto óptico que ocasiona la sal cuando la cubre una fina capa de agua, ya que hace que pasear por su superficie sea como dar un paseo por las nubes. Ocupa una superficie de 12.000 kilómetros cuadrados y se ubica a 3.500 m  sobre el nivel del mar.

Últimamente se  ha convertido en un paseo imprescindible para quienes visitan Bolivia. Lo más conveniente es acceder desde San Pedro de Atacama, al norte de Chile. Se puede alquilar una 4×4 con guía en el mismo pueblo. Los tours suelen ser de cuatro días y se realiza un recorrido de ida y vuelta hasta San Pedro. De esta manera, se pueden conocer otros sitios de gran belleza como por ejemplo la Reserva Nacional Eduardo Avaroa con la Laguna Colorada, una de las reservas de flamencos más grandes del mundo, y la Laguna Verde al pie del volcán Licancabur, cuyo color  se debe al azufre y al magnesio de la zona.

También se puede presenciar un espectáculo único como son los géiseres y fumarolas, que expulsan agua a más de 90º de temperatura. Otros atractivos son el llamado Desierto de Dalí, el árbol de piedra o la montaña Arco Iris. Por último se puede disfrutar de un relajante baño termal en las aguas termales de Polques.

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