Una ciudad que con sus misterios enamora a turistas cada año llegando a convertirse en la segunda ciudad más popular de Marruecos. Anímese a perderse en sus calleas laberínticas y sorpréndase con su antigüedad y sus aires imperiales que aún permanecen plasmados en sus edificios.
Fez en los últimos años ha crecido en popularidad entre los turistas extranjeros, un lugar distinto con miles de secretos por descubrir, una cultura por conocer, su riqueza y antigüedad la convierten en una de las ciudades imperiales más importantes. Conocida por ser Capital religiosa de Marruecos y famosa por su división de zonas, la medina antigua, la medina nueva, y la ciudad antigua, fueron creadas en el siglo VIII demostrándonos como los años no las han afectado. Actualmente sus zonas más distinguidas y elegidas por los turistas son los paseos por zocos de Fez el-Bali, echar un vistazo a las escuelas coránicas o dejar pasar las horas sentado en una terraza en Villa Nouvelle.
Su zona más antigua, Fez el-Bali, es hogar de los principales museos y alberga más de nueve mil callejones abrazando cientos de barrios. Famosa por sus calles laberínticas, rebalsan de visitantes y marroquíes, es también conocida por ser «La medina antigua», la cual en la antigüedad contaban en sus calles con una mezquita y un Hammam.
«El-Medinet el-Beida» conocida por los marroquíes como La Ciudad Blanca o Fez el-Jdid famosa por ser sede del Palacio Real el cual puede admirarse, pero no visitarse lamentablemente, y por supuesto, por otro lado, «Mellah», el Barrio Judío en el cual sus arquitecturas y mercados son el centro de atención robando todas las miradas. «Mellah» hoy en día cuenta con dos calles principales el Boulevard Bou Ksissat adornado en su recorrido con balcones que se alejan de las típicas edificaciones musulmanas y la Calle Grande Rué de Fes el Jdid, abarcando el mercado árabe y el mercado cubierto.
La Ciudad Nueva de Fez, «Ville Nouvelle», su existencia data desde el siglo XX y es la ciudad nueva en la zona habitada en su mayoría por extranjeros o marroquíes adinerados. Es una zona de lujo, su calle principal es Hassan II y cruza con Mohammed donde el Banco Marruecos y la Plaza de Florencia se hacen presentes, pero la avenida cuenta no solo con lo ya nombrado sino que es elegida por muchos para tomar un café durante la tarde o pasear para conocer las inmensas y hermosas terrazas o adentrarse en una pastelería local y tomarse un te admirando los jardines que adornan a Hassan II.
En lo que ha su gastronomía refiere, pues… sus sabores son algo único, en Villa Nouvelle encontrara restaurantes de lo más variado en el mercado marroquí, no únicamente la comida tradicional que no puede dejar de probarse, sino también un mix de gastronomías mundiales, en especial europeas, que se reúnen aquí para regalarle una fiesta a nuestras papilas.
Luego de haber dado un recorrido por sus zonas más destacadas, sin duda alguna no debe dejar de visitar la Curtiduría Chouwara la cual hoy en día sigue en pie siendo una de las cuatro curtidurías vivientes en el mundo y la más extensa de ellas. Desde las alturas pueden admirarse los miles de colores y en sus calles sus aromas. Se ubica en el corazón de Fez el-Bali y cuenta con miles y miles de fosas con tintes naturales que no deben dejar de ser visitados.
Antes de finalizar este bello viaje no olvide sacarse una foto en «La Puerta Azul» conocida también como Bab Boujloud, una puerta inmensa que se abre a las dos calles comerciales más grandes Talaa Kebira y Talaa Seghira al noroeste de la antigua Medina. Hermosa e imponente con sus tres arcos fue construida en el año 1913 y le da un toque encantador a la zona Fez el-Bali.
Visitar la ciudad de Fez es darse la oportunidad de soñar con un mundo mágico donde las lámparas y las alfombras cobran vida y donde usted puede ser protagonista de vivir Las Mil y Una Noches y adentrarse en una aventura sin fin que llevara en su memora por siempre.